El mito de la edad de oro

Todo sería más fácil si viviéramos en otra época en que la gente no fuera tan _____________

 

Ahí puedes poner lo que sea:

Tan materialista.

Tan interesada.

Tan egoísta.

Tan superficial.

Tan malvada.

Tan cruel.

Tan indiferente.

Quejas, todo quejas.

 

Y ya oigo tu justificación : “Sí, pero es que en realidad hoy en día….”.

Pues quizá no.

 

Por: flickr.com/photos/fabiolarebello/206950948/

Los tiempos que vivimos son los peores.

 

Hace unos días Homominimus ( que siempre envía por twitter cosas muy interesantes) retuiteó esto:

 


Lo que traducido significa:

 

“Los tiempos son malos. Los hijos ya no obedecen a los padres y todo el mundo escribe un libro”. Marcus Tullius Cicerón. 

 

Y todos: padres, escritores y cualquiera en general, estaría de acuerdo con esa afirmación. Solo hay un problema. Cicerón vivió hace dos mil años.

 

Cualquier tiempo pasado fue mejor.

 

Ya lo dijo el poeta Jorge Manrique: “Cualquier tiempo pasado fue mejor”.  Vemos que el mundo no es cómo querríamos que fuera y nos imaginamos que en el pasado era diferente.

¿Por qué? porque el pasado no hace sino cumplir el efecto planeta azul, de que hablamos en otro post. Todo visto desde la distancia parece mucho más perfecto.

Lo curioso es que hace unos años, leí en algún lugar, un estudio en que el autor recogía la opinión de los mayores sobre los jóvenes en todas las épocas. Y con un gran trabajo el autor conseguía encontrar desde hace dos mil años, cada cien años al menos, una cita en que algún escritor decía que la juventud ya no era como antes.

 

El mito de la edad de oro.

 

En muchas mitologías, existe la creencia de que inicialmente la humanidad pasó por una edad de oro, luego por una de plata, y por una de bronce, hasta llegar a la edad actual mucho menos noble. No sé si es por la influencia de nuestros recuerdos de la infancia, en que aún éramos inocentes y pensábamos que la gente era mucho menos egoísta de lo que en realidad es.

 

La realidad.

 

El mundo no ha cambiado en lo esencial desde el principio de los tiempos. Ahora tenemos móviles y no hacemos señales de humo. Ahora miramos la televisión e internet en lugar de contarnos cuentos delante de la hoguera. Pero seguimos siendo egoístas, cooperadores, envidiosos, amables, ambiciosos, conciliadores.

La naturaleza humana no ha cambiado. Por eso puedes leer una historia de hace dos mil años y seguir perfectamente la trama, y comprender los sentimientos. Los sentimientos básicos de los seres humanos son siempre los mismos.

 

Para qué te cuento esto.

 

Todo esto no te lo digo para que te sientas mal. No te lo digo para que llores y te quejes de lo mala que es la gente. Te lo digo para que seas consciente de que si quieres que el mundo sea mejor, no puedes esperar que las cosas cambien. El único cambio que importa, es el cambio que hagas tú. Y no puedes esperar por él.

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3 comentarios en «El mito de la edad de oro»

  1. Cualquier tiempo pasado fue mejor y cualquier novedad es diabólica. Cuando se inventó la imprenta, era diabólica porque los libros auténticos eran los que se copiaban a mano en los monasterios. Ahora le toca el turno a internet, los móviles y los coches eléctricos…

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  2. Soy rara yo creo que cada vez todo es mejor, las mujeres tenemos más derechos y más opciones, los inventos nos amplían alternativas, definitivamente me gusta y creo que el futuro será mucho mejor…

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    • A mucha gente le parece que tecnológicamente la cosa irá a mejor. Pero a la vez muchos piensan que cada vez la gente es peor, cuando en realidad, siempre ha sido igual. Un saludo, y gracias por comentar.

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