La regla de titanio para tratar a las personas.

Hay un principio reconocido en casi todas las civilizaciones y culturas para tratar con los demás.

Es la famosa regla de oro.

Trata a los demás como querrías que te trataran a ti

no hagas a los demás lo que no quieras que te hagan a ti.

Esa regla de oro existe desde la civilización egipcia y ha tenido formulaciones en muy diversas religiones y filosofías.

Kant en su Crítica de la razón pura, la establece como base de la ética. Es el famoso imperativo categórico kantiano que posiblemente estudiaras en el colegio: Actúa de tal modo que puedas igualmente querer que tu máxima de acción se vuelva una ley universal.

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El problema de la regla de oro. La regla de titanio

 

El dramaturgo George Bernard Shaw ya indicó el problema de la regla de oro.

“No hagas a los demás lo que quieres que te hagan porque sus gustos pueden no ser los mismos”

Cada uno tiene sus preferencias. Lo que para ti es inaceptable, para otra persona quizá es lo preferido.

Por eso Claire Raines habla de la regla de titanio.

“Haz a los demás según sus gustos”. 

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Mirar la vida desde los zapatos de otra persona.

Uno de los principios esenciales de las relaciones sociales es ser capaz de mirar la vida desde la perspectiva del otro. En su curso de persuasión en una frase Rick Warren dice que:

Para Rick Warren la gente hará cualquier cosa por aquellos que:

– Apoyan sus sueños.

– Justifican sus fracasos.

– Les liberan de sus miedos.

– Confirman sus sospechas .

– Lanzan piedras a sus enemigos

Hay un elemento en común, en todas las frases. La palabra “sus”. A la gente le importan cosas diferentes a las que te importan a ti.

 

Sintonizando con los otros.

Cada uno ve el mundo de una manera diferente, la regla de oro ignora eso. La regla de oro considera que todo el mundo quiere lo mismo. Pero todos sabemos que eso no es cierto. 

Hay algunas cosas que para algunos son maravillosas y para otros no son nada apetecibles. ( A algunas personas les encanta correr ultra-maratones o ser azotadas, a mí no me gusta ninguna de las dos cosas)

Hay muchas cosas que para algunos son importantes y que a otros no les importan nada. ( P ej: a mí me trae sin cuidado que me regalen una entrada a un concierto de música, y para otra persona puede ser el día más feliz de su vida)

Y sobre todo, hay muchas cosas que nos gustan a todos pero que son más importantes para unos que para otros. Y esas son las que fundamentalmente provocan el conflicto.

Para mí es muy importante que si quedo en algo con una persona, eso se cumpla. Si te digo que estaré en tal lugar a tal hora, me ha de pasar algo grave para que no lo haga. Pero al mismo tiempo me sentará muy mal si tú decides cambiar la cita. Otras personas cambian con facilidad sus acuerdos, pero tampoco les molesta si tú los cambias también.

Cada persona tiene una visión del mundo.

La regla de titanio

Y con eso no te quiero decir que hayas de cambiar tu visión del mundo y adaptarte a la de la otra persona. Solamente que has de tener en cuenta que cada uno ve el mundo de una forma. Y que si has de convivir con otras personas no puedes olvidarlo.

 

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13 comentarios en «La regla de titanio para tratar a las personas.»

  1. No creo que haya nadie “normal”al que le guste que le den planton, le insulten, le discriminen o le traten con violencia, le ridiculicen, le pisoteen, le asusten… Y podríamos pensar en muchos más ejemplos. Con esto quiero decir que la Regla de Oro sí puede ser una máxima a seguir en multitud de ocasiones.
    De todos modos, en lo que a relacionarse con los demás se refiere, a mí me gusta más utilizar palabras como tolerancia, respeto, comprensión hacia el otro… Y hablo de ” el otro” refiriéndome solo a la persona, no a sus ideas o creencias.
    También creo como tú, que ponerse en los zapatos de los demás es importante para entenderse. El problema suele venir cuando, viendo lo diferente que calzan los demás, tenemos que hacer algún esfuerzo en forma de acto de generosidad. Nos hemos vuelto tan tan egoístas que así nos va. Y sí!! ya sé que vas a decir aquello de que en el fondo el ser humano siempre actúa egoístamente y bla bla bla…

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  2. Discrepo, Enusiasmado: No se quien es el tal Reines y de Kant solo se algo por el Bachillerato, pero creo que interpretas mal la Regla de oro pues en cuestiones eticas hay que partir de un minimo incuestionable: que el amor propio es de las pocas cosas que pueden servirnos de referencia para actuar: que uno se de una mala vida no aplica en estos casos.
    Respecto a la Regla de titanio me parece que puede venir bien para el marketing pero en cuestiones morales da un poco de susto eso de satisfacer los gustos de los demas: bastante me cuesta tener mis fobias bajo control como para entregarme a las de otros.
    saludos.

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    • Gracias por tu aportación Pedro. Yo no estoy de acuerdo contigo y con Diana, creo que aunque a casi todos nos gustan las mismas cosas, las prioridades son diferentes. Qué quizá para ti es importante que te acerque al aeropuerto si vas a tomar un avión, y a mí no me importe. Que quizá a ti te da igual si quedas en mandarme un mensaje y no me lo mandas y a mí sí me importa.
      En todo caso me gusta que habla discusión.

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  3. Un gran artículo, me parece que la regla de titanio hace referencia a satisfacer a otros “hasta donde podamos”, que satisfacer a todo mundo con sus gustos y manías es complicado.

    La regla de oro casi nadie la cumple, lo digo por experiencia, depende el contexto y de alguna manera la utilidad que tenga a futuro; con relación a la moralidad y ética, depende de cada sociedad, existen reglas básicas de como convivir con los demas, y me parece que ahí ya no importa si yo quiero que me traten así.

    En conclusión, me quedo con la de titanio, jaja.

    Pd: Adoro leer a Bernard Shaw, me cambio un tanto la forma de ver las cosas, recomendado. XD

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  4. Confieso que llevo dándole vueltas a este tema desde ayer.
    Pienso que aplicada con sentido común, la Regla de Oro me vale. La de Titanio también me vale, porque me recuerda que no debo olvidar las preferencias de los demás.
    Las 5 reglas de Warren son útiles para hacer que la gente se ponga de tu lado, sí. Son buenos “truquillos”para utilizar en ocasiones pero no me gustan como regla a seguir en lo que concierne a las relaciones con lo demás.
    Me ha gustado el post Iván.
    Un abrazo

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  5. Para mi la regla de oro debería definir tu forma de actuar, la regla de titanio creo que deberíamos aplicarla para comprender a otros, lo que yo no haría sería modificar mi comportamiento en función de la regla de titanio, creo que perdería mi identidad.

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  6. Creo que lo importante es que aprendamos a relacionarnos con los otros, me encanta tu estilo y el mensaje creo que empezare a imprimir lo q más me gusta de tus post, por cierto a mi esposo le encantaron tus dibujos

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  7. la regla de o oro no se basa en gustos si no en el deseo natural del hombre de ser tratado correctamente de forma general no hay que interpretarlo de forma tan extrema y exagerada

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