Cómo hacer que el amor dure siempre.

Seamos sinceros. A todos nos gustaría pensar que la persona que nos ama nos va a amar siempre. En muchas ocasiones buscamos promesas que traten de amarrar las nubes y de solidificar los mares. Promesas que espanten los fantasmas del desamor y que eliminen las incertidumbres. Pero en el fondo sabemos que hagamos lo que hagamos, no podemos conocer el futuro.

Todos queremos sentirnos seguros.

Es complicado amar sin tener seguridad. Es difícil amar si no sientes que la persona que amas no va a volar como un globo de helio que un niño distraído suelta por un segundo. Nadie quiere dar algo tan importante como es el amor sin saber que hay una estabilidad, sin notar que lo que se siente por la otra persona es real y duradero.

Es tu responsabilidad hacer que la otra persona se sienta segura contigo. Es tu responsabilidad resolver sus dudas y miedos. Y es tu responsabilidad exponer tus temores para que la otra persona te pueda ayudar a superarlos.

Es necesario que sepas que nunca estarás seguro.

No hay palabras que puedan eliminar la incertidumbre a largo plazo. Nadie puede prometer sinceramente sentir algo en el futuro. Los árboles están llenos de corazones tallados en navaja con los nombres de parejas que hace tiempo dejaron de mirarse a los ojos. Los puentes de Roma están llenos de candados olvidados.

El hombre es un animal egoísta. Y obviamente incluyo a ambos sexos. Y eso no es malo. Somos egoístas en el amor porque queremos la mejor persona posible. El amor, por mágico que nos resulte, es un sentimiento nacido de la evolución y que tiene como finalidad buscar a la persona que más nos aporte en términos de reproducción y supervivencia.

La seguridad en la inseguridad. ¿Por qué amamos a alguien?

Existe incertidumbre en lo que ocurrirá, es cierto. Pero no existe incertidumbre en las reglas que rigen los sentimientos. El amor no es loco, aunque lo parezca. El amor no es una ruleta que gira hasta que se detiene, ciega, en una persona determinada.

Muchas veces no entendemos porque amamos a alguien. Pero eso no significa que no exista una razón. Significa que hay una razón que nuestro entendimiento aún no ha captado.

Y la razón no es, cómo a veces pensamos, por las características o las circunstancias de esa persona. No amamos a alguien porque sea atractivo, inteligente o divertido.

El motivo por el que amamos a alguien siempre es el mismo: Le amamos por lo que nos hace sentir.

Todas las características y circunstancias importan por lo que significan en sensaciones.

Si una persona es divertida, eso nos hace pasarlo bien y nos produce también admiración.

Si una persona es atractiva, eso nos puede hacer sentir deseo, orgullo, admiración, placer estético.

Si una persona es sincera, eso nos genera confianza y conexión.

Si alguien es capaz de sorprendernos, eso nos hace sentir disfrute y una anticipación sugerente.

Si generas en alguien más sentimientos placenteros que los que otras personas puedan producir, esa persona no podrá o no querrá prescindir de ti.

Cómo desaparece el amor.

En una primera aproximación podría decir que el amor desaparece cuando la otra persona ve que alguien más le puede hacer sentir mejor.

Pero esa frase requiere muchas matizaciones. ¿Cuándo dejas de amar?

Para empezar “sentirse mejor” no expresa bien la realidad. Lo importante es generar más sensaciones de las tú quieres sentir. Algunos valoran mucho el sentirse apreciados, otros disfrutan sintiendo cosas más mezcladas. Para unos es importante sentirse admirados, para otros admirar. Unos disfrutan teniendo a su lado alguien capaz de controlar sus sentimientos, otros prefieren sentir a alguien apasionado. Se trata de que alguien sea capaz de generar los sentimientos que deseas, sean cuáles sean.

Lo importante no es que exista ese alguien más que puede producir más sentimientos sino que tú creas que esa persona existe. Es una estimación, una proyección. Algo que crees. Pero a los efectos de amar o no amar es lo importante. Podría no haber nadie que te haga sentir mejor nunca, pero si tú crees que lo hay, dejarás de amar, aunque sea un poco. Podría haber mil personas que te harán sentir mejor, pero si no crees que las haya, no dejarás de amar.

No basta con que creas que existe una persona que te puede hacer sentir más cosas de las que quieres. Es necesario que consideres que esa persona está a tu alcance.  Muchas personas creen (justificadamente o no) que hay otras que les harían sentir mejor que sus parejas, pero no dejan de estar enamoradas, porque no creen que esas personas estén disponibles. El caso típico es el de la idolatría por personajes famosos. Una chica puede imaginar ( sin mucha base real obviamente) que se sentiría mucho mejor con George Clooney que con su pareja. Pero eso no hace que deje de querer a su novio, porque George Clooney no está disponible para ella. Sin embargo si cree que un compañero de trabajo le va a hacer sentir muchas que su novio, posiblemente sí dejará de amarle.

Así que refinando un poco la idea inicial podríamos decir que uno deja de amar cuando cree que existe alguien alcanzable que le puede generar más sentimientos de los que le gustan que su pareja actual.

Cómo hacer que el amor dure siempre.

A veces pensamos que para que el amor dure para siempre hemos de cruzar los dedos y esperar que los dioses nos sean propicios. No es así. Pero tampoco es algo que dependa solamente de nosotros.

Para que el amor dure es necesario que las dos personas que están en la relación crean que no hay otra persona a su alcance que les pueda hacer sentir más cómo desean sentir. En cuanto alguna de las dos personas crea que sí la hay, podrá subsistir la relación o no, pero el amor estará perdido.

No puedes estar seguro de que conseguirás un amor que dure para siempre. Tú sí puedes conseguir que la otra persona siempre quiera estar contigo. Para ello tienes que conseguir que sepa que no se podrá sentir con nadie como se siente contigo. Pero de lo que no puedes estar seguro es de que tú amarás siempre, porque eso depende de que la otra persona quiera seguir dándote todo lo que necesitas.

Son precisas dos personas con intención de poner mucho de su parte para conseguir un amor que dure siempre.

¿Que deberías hacer tú si quieres que el amor dure siempre?

Deberías hacer dos cosas: creer y no creértelo.

Creer que la otra persona será capaz de esforzarse por hacerte sentir como tú deseas sentirte.

Y no creértelo. No creer que tener una relación con una persona ya es bastante. Has de conseguir que desee intensamente seguir contigo. Si eso falla, no habrá títulos ni promesas que puedan salvar el amor.

Conseguir un amor que dure siempre no es imposible. Lo que sí que es imposible es conseguirlo sin poner mucho esfuerzo.