Una cuestión que se plantea frecuentemente en la pedagogía moderna es la necesidad de que los padres sean amigos de los amigos. Pero ¿debe ser así?
¿Deben los padres ser amigos de los hijos?
La opinión de Ernesto Sábato sobre la amistad entre los padres y los hijos
El escritor Ernesto Sábato , en una antigua entrevista, explica porque cree que los padres no deberían ser amigos de los hijos. Puedes ver el vídeo a continuación o leer la transcripción del vídeo después.
Entrevistador: ¿además de hijo, puede usted llegar a ser amigo de su padre?
Ernesto Sábato: ¿no es un caso, no? No funcionaba. Y no estoy en desacuerdo con eso, se habla muy a menudo en la educación moderna. La amistad del padre con los hijos es un error. ¿O una mala definición de la palabra amistad? La amistad es entre iguales, el padre no es el igual del hijo, el padre es mucho más y mucho menos que un amigo. No es un igual. Es otra jerarquía y eso ayuda luego. Al chico cuando se desarrolla. Necesita apoyarse en alguien que sea superior y fuerte. Y estoy de acuerdo con eso, creo que la psicología moderna, cometido graves errores de las qu’está rectificando ahora. El sistema de padre e hijo, digamos así, es un sistema milenario multimillonario probado por todas las comunidades y por todas las civilizaciones. Y los descubrimientos, no sé si llamarlos así. De la psicología moderna, tienen 30 años de antigüedad. Se están revelando muy a menudo equivocados. No fuimos amigos de papá de ninguna manera.
Entrevistador: ¿esa ruptura generacional, entonces, de qué se habla tanto ahora? ¿Eso de que los hijos quieren en cierto modo, liberarse de los padres y vivir un poco por su cuenta y razón? ¿Usted cree que es algo pasajero?
Ernesto Sábato: sí se comprende. Toda persona, quiere liberarse de las ataduras, hay una actitud siempre así, pero los hijos? Vuelven siempre al padre, si el padre es comprensivo, cuando he dicho qu’el padre es el padre, no quiero decir que sea incomprensivo, no quiero decir que sea terrible. Para mí, la relación padre e hijo debe ser severa y afectuosa y esa no es una contradicción, sino una cosa complementaria. El chico tiene que encontrar en su padre, un hombre comprensivo y justiciero. Los chicos aprecian mucho a la justicia muy a menudo, los chicos se rebelan contra la injusticia y eso es me parece bien. Siempre hay que rebelarse contra la injusticia. Pero una cosa es la injusticia, otra cosa es la jerarquía, la jerarquía debe basarse en la justicia. Y creo que la relación de padre e hijo es jerárquica. En cuanto a la rebelión actual, lo único que puedo decir es esto como escritor: Yo recibo miles de cartas de muchachos chicos. Que me escriben a mí. Y por el tono de las cartas por el contenido de las cartas. Me doy cuenta que no tienen padre. Y recurren a una persona más grande. Que presumen con razón o sin ella, que nos puede ayudar, como recurrirían al padre, a que los chicos necesitan un padre siempre y si no lo tienen, la casa lo buscan afuera.