El “decálogo para ser más creativo” es un artículo escrito enteramente por la experta en creatividad Anca Balaj de www.AncaBalaj.com
Aprovechando la ocasión que me da Iván para escribir en su blog así como el curso de creatividad, voy a hacer algo que nunca hago: un decálogo. Son mis diez reglas, a grandes rasgos, intentando incluir en ellas de la mejor manera posible todo aquello que para mí configura el enorme mundo de la creatividad. Sin más preámbulos, allá van:
1. Juega.
Juega con todo, con las palabras, con los objetos, con los conceptos. Está bien, también con videojuegos si quieres, pero esa no es la mejor opción y desde luego no debería ser tu única manera de jugar. Hay que jugar en la mente, con lo que tienes a disposición en cada momento, aunque sólo sean tus pensamientos mientras esperas turno en la consulta del médico. El juego despertará tu hemisferio derecho del cerebro, que es el encargado de la creatividad. Además te librará de la obligación de obtener buenos resultados.
2. Experimenta.
Dale siempre a tu cerebro cosas sobre las que investigar, pierde el miedo a lo desconocido y prueba a hacer algo que no sepas sin “manual de instrucciones” y sin profesor. Descárgate un programa para hacer dibujos animados y prueba cómo se hace, tocando todos los botones y a ver qué pasa. Confecciona una chaqueta copiando el patrón de alguna que tengas por casa. Rescata la vieja cámara de fotos de carrete y revélalo tú. Lo importante no es el resultado, sino el hecho de experimentar con lo desconocido y volver a la mente de principiante. Experimentar de esta manera te descubrirá nuevos mundos (tal vez alguno que te apasione) y te ayudará a perder el miedo a hacerlo mal.
3. Aprende.
Aprende todo lo que puedas de todo el que puedas. Olvídate de programas de estudio estructurados, busca tu propia ruta de aprendizaje. Examina tus conocimientos, determina qué es lo que te falta y busca ese aprendizaje allá donde esté, aunque no venga en el “menú” de tal o cual carrera. No aprendas de “menú”, escoge tú mismo los platos. Aprender de esta manera te ayudará a crecer en la dirección en la que tú necesitas crecer y no la que otros hayan decidido sin conocerte siquiera.
4. Practica.
Obsesiónate con tu pasión y practica. A diario. No es necesario seguir un guión, empieza por la primera lección o por la cuarta. Practica y comprueba tus límites, cuando los retos sean demasiado grandes para tu capacidad actual, vuelve un paso atrás, sigue practicando y vuelve a probar un tiempo después. Practicando así vas a lograr habilidades que después te serán muy útiles para innovar en tu campo.
5. Lee.
Lee sin parar. A ser posible, lee de todo, incluso basura. Lee lo que cuentan los grandes y lee lo que cuentan los desconocidos. Si ya llevas un tiempo “en el mundillo” de lo que quiera que hagas, sigue buscando a los desconocidos. Estos tienen algo que contar que se aleja del discurso oficial, porque los “mundillos” tienden a ser grupos cerrados de gente avenida y discurso uniforme, los que opinan distinto no están ahí. Leyendo todo esto vas a ampliar tus miras y a descubrir puntos de vista diferentes.
6. Elimina.
Elimina todo lo que te impida crear y que sea eliminable. Elimina las personas tóxicas, elimina creencias, elimina actividades innecesarias… Elimina incluso proyectos cuando quieras centrarte en algo concreto y el tiempo no dé para más. De tu trabajo creativo también elimina todo aquello que sólo sirva para dar volumen y todo lo que no sea sincero. Si lo tuyo es escribir, elimina el principio y el final, como decía Chejov. Eliminando lo que no sirve ganarás claridad.
7. Diversifica.
No te ciñas a un único proyecto ni a una única disciplina. Tus emociones fluctúan y cada etapa del proceso creativo requiere de un estado de ánimo diferente, por lo que es mejor tener varios proyectos entre manos, que se encuentren en diferente fase o requieran de un lenguaje diferente. También superarás los bloqueos de esta manera, cuando un proyecto se estanca o no está lo suficientemente maduro, puedes continuar trabajando en otro. Diversificando siempre vas a tener algo creativo que hacer.
8. Combina.
Combina tus conocimientos y habilidades. Busca el punto en el que todas ellas podrían conformar una sola cosa y llévalo a cabo. Si eres atleta y te gusta cocinar, crea recetas para atletas. No importa si eres del montón en estas habilidades, porque en tu combinación única y personal serás el mejor. Combinando tus talentos y aficiones vas a sacar a relucir todo tu potencial creativo.
9. Autogesiónate.
Gestiona tu tiempo para encontrar el momento innegociable en el que crear. Gestiona tus emociones para que éstas no se apoderen de tus actos. Gestiona tu pereza, tus resistencias, tus temores, tus dudas y tu ego. Aprende a confiar en ti cuando dudes y a dudar de ti cuando confíes. Tomando el control es la única manera de ser creativo.
10. Cuídate.
Cuida tu cuerpo y cuida tu cerebro. Descansa, come sano, olvídate del alcohol y de las drogas. Tu cuerpo necesita estar sano para alojar una mente tan potente. Tu mente necesita estar sana para bucear entre las mejores ideas. Tu cuerpo y tu mente son el templo de tu creatividad, respétalo.
Alguna cosa se habrá quedado fuera de este resumen, sin duda. Alguna dolerá y alguna puede que te toque la fibra. Sea como sea, vale la pena probar estas diez recetas y las diez de cualquier otra persona hasta conseguir la combinación de tus propias diez. También con esto, lo mejor es que experimentes y aprendas a solas.
Me llama especialmente la atención la 8-Combina.
Todos tenemos conocimientos y habilidades diferentes y me parece una idea buenísima hacer combinaciones entre ellos para tener diversidad de proyectos que de entrada no habrías pensado y que te pueden llevar a buscar nuevos conocimientos para seguir haciendo diferentes proyectos.
Practico deporte casi a diario y me encanta cocinar,pero no se me habría ocurrido lo de las recetas para deportistas 🙂
Muy interesante !!!!
Muchas gracias, un saludo.
Un gran post Anca. Con 10 ideas muy buenas para aplicar a cualquier clase de creatividad. Por cierto Isara, ¿has probado a correr mientras cocinas? y a hacer una especie de deporte consistente en cocinar diversas cosas a toda velocidad?
Ese deporte precisamente lo suelo practicar habitualmente 🙂 cocino varias cosas a toda velocidad.
Bravo!! Buenísimo!! Me lo pongo en favoritos! Es casi mi decálogo! <3
Gracias, Ivan, por invitarme a escribir aquí. Espero que sea útil alguno de estos puntos a alguna persona.
Saludos
Gracias a ti por tu magnífica aportación.