Muchas veces se dice que en la cumbre se está solo. ¿Es una excusa de los que tienen poder para seguir teniéndolo o es que realmente nos sentimos peor cuando tenemos poder?.
¿El poder nos hace más felices?
En un estudio de 2o12 ( Kifer y otros ) se ha investigado si el poder aumenta el bienestar subjetivo. En cuatro estudios relativos a cuatro campos muy diferentes ( general, trabajo, relaciones románticas, y amistades) se ha comprobado que a mayor poder mayor sensación de bienestar.
¿Cuál es el motivo? Para los investigadores, el poder permite sentir más autenticidad, y esa autenticidad nos hace más felices. De hecho en un estudio posterior, se alteró la autenticidad, y se descubrió que a mayor autenticidad mayor sensación subjetiva de bienestar.
Los autores del estudio afirman que a diferencia del intento de buscar el poder, que nos hace sentir peor, el tener poder nos hace sentir mejor.
Reflexión.
Una de las cosas que más afectan a nuestro bienestar es la falta de control sobre nuestro entorno. Cuando no tenemos poder, no tenemos demasiado control sobre lo que nos ocurre. Y además no podemos ser nosotros mismos igual.
Piensa en la situación de una empresa. El empleado tiene que mantener una actuación adecuada a los estándares que se esperan de él. Puede que tenga que vestir de una determinada manera, actuar de una manera correspondiente a la filosofía de la empresa, no expresarse de una forma que sea contraria a la linea de la empresa. Incluso en el caso de las nuevas empresas que dan mucha libertad a los empleados, hay una linea de actuación que puede ser o no conforme a la filosofía vital del empleado.
El dueño de la empresa por otro lado es el que ha establecido esa filosofía, así que es más que lógico que esté conforme con ella, o habría establecido una diferente. Puede vestir, opinar, o actuar con mayor libertad.
Y lo mismo que se dice del dueño se puede decir del jefe de cada sección. En su sección goza de un cierto control sobre el entorno, de una cierta libertad, con lo que es más fácil que pueda sentirse realizado.
En la cumbre se puede estar solo, pero debajo se está bastante peor.
Leo este post y no sé si estoy de acuerdo con la última frase. Debajo del que tiene el poder ( el dueño de una empresa o cualquier jefe por ejemplo)no se tiene por qué estar peor no? Yo no soy jefa de nadie, soy una empleada más. Y no considero que esté peor que los “poderosos”de mi empresa. Que por otro lado estoy segura que se sienten solos muchas veces.
Creo que el sentirte peor depende de las aspiraciones que tengas en tu trabajo por ejemplo. Yo no quiero ser jefa. Me basta con hacer bien mi trabajo, crear buen ambiente y poder conciliar mi trabajo con mi vida familiar. No tengo el poder en la empresa pero no lo necesito. Y estoy abajo y no estoy peor que los de arriba.
Es curioso Iván. Por otro lado, soy gerente de mi familia, que es mi mayor empresa ( empresa en la que tengo mis proveedores, mi empleada, mis tres clientes que son tres soles, mis presupuestos…). Controlo ese entorno. Digamos que tengo el “poder”. También siento la misma soledad a veces que puede sentir un emprendedor por ejemplo. Pero cuando veo que mi “empresa” marcha y consigo resultados ( las notas del cole han sido fantásticas, el peque va obedeciendo, el segundo se ha superado venciendo su timidez y me han felicitado en el colegio, la mayor ha ganado una olimpiada de mates…)… Veo que merece la pena también estar arriba y me siento bien.
Así que esta teoría quizás funcione en determinados ámbitos de la vida y en otros no.
Un abrazo
Ana quizá en tu caso no es así. Pero la cuestión es que en general a mayor poder, más posibilidad de ser nosotros mismos. En una casa, tú marcas las normas y tus hijos las tienen que respetar. Eso hace que sea más difícil ser ellos mismos. En el trabajo pasa lo mismo pero al revés. En todo caso creo que hay gente que está acostumbrada a no tener poder, y les supondría un estrés muy grande tenerlo. Y hay otras personas que necesitan tener poder.
Preguntas si el poder nos hace felices o más felices, lo enfocas desde el poder sobre otros, pero el poder real es el que seas capaz de ejercer sobre ti mismo.
¿Dominas tu cuerpo y tu mente?
Creo que esa es la cuestión.
Poder>autenticidad>sensación de bienestar.
Si eres tu el que domina (por ejemplo tu cuerpo y mente) serás auténtico y por lo tanto sentirás sensación de bienestar.
Eres esclavo de donde pones tu corazón, como conclusión dominemos nuestra mente y cuerpo para controlar de que seremos esclavos, pero siempre seremos esclavos de algo, la cuestión es elegir el mejor “amo”.
Estoy totalmente de acuerdo contigo en lo del control personal. Aquí me refiero al poder en la sociedad, pero es evidente que cuanto más poder tengas sobre ti mismo, más feliz serás.