Cambiar nuestra manera de ser, lo que sentimos y pensamos es complicado. Y aunque muchas veces digo que hay que desconfiar de los atajos, en ocasiones sí que existen atajos, y hay maneras en las que se puede mejorar sin demasiado esfuerzo. Una de las más útiles es el “actuar como sí”. El “fake it till you make it”  ( fíngelo hasta conseguirlo) de los americanos.  En su libro The As If Principle: The Radically New Approach to Changing Your Life Richard Wiseman habla de unos cuantos trucos que permiten aplicar la teoría del “Fake it till you make it” para mejorar tu vida.

1. Si quieres que un objeto te guste menos apártalo de ti. Si quieres que te guste más acércalo. Inconscientemente te estás enviando la señal de que lo que acercas te gusta y lo que alejas no te gusta. Como  un niño que dice “No quiero más lentejas”, el acto en sí mismo refuerza tu rechazo del objeto.

2. Para aplicar más fuerza de voluntad, siéntete fuerte. Puede parecer cómico, pero si tensas tus músculos, tu fuerza de voluntad aumenta en ese momento. Así que la próxima vez que vea un croissant de chocolate, me pondré en posición de defensa con los músculos más tensos que un periodista de la sexta en una comparecencia de Rajoy.

3. Para sentirte más seguro adopta una posición de más confianza. Una posición abierta, con la cabeza alta, los hombros hacia detrás el pecho hacia delante, te hará sentir más seguro. Sin embargo si caes en una posición con los hombros y la cabeza bajos y cerrada verás como enseguida te sientes peor.  Es lo que se llama “posición de perdedor”.Bueno no se llama así pero no sería mala idea que se llamara.

4. Finge entusiasmo por la tarea que estás comenzando. Si comienzas a hacer algo como si te encantara, puede que no te llegue a encantar pero si es posible que te resulte más agradable.  Esa era la idea de cómo no odiar los lunes.

5. Para que la gente acepte tus propuestas con más facilidad puedes hacer el movimiento del sí con la cabeza de arriba a abajo mientras estás hablando. Inconscientemente se sentirán más inclinados a darte la razón. Algo parecido es eso de “Como tu bien sabes, la proporción de ornitorrincos ha crecido de manera exponencial en los últimos años y bla bla bla”, en la que la afirmación desarma tu posibilidad de oposición.

6. Sienta a la gente en un asiento blando si quieres que su posición sea menos firme. Hay estudios de lo más curioso, y hay uno que dice que la gente cuando está sentada en un asiento blando es más dialogante que cuando está en un asiento duro. Si la próxima vez que vayas a comprar un coche de segunda mano, tu butaca es muy mullida, desconfía. Y si vas a una charla de multipropiedad, por si acaso mejor siéntate en el suelo.

7. Ofrecer bebidas calientes hace que la gente se sienta más receptiva a tus palabras. ¿Recuerdas ahora cuando en el bazar te ofrecían te antes de intentar venderte una alfombra turca?. No sólo era una costumbre del país. Si estás pensando en llevar a tu próxima cita a un Starbucks quizá sea buena idea. Pero que no pida un Frapuccino con hielo.

8. Usa tu mano menos dominante para la comida y comerás menos. Todo lo que suponga un cambio hará que seas más consciente de tus actos. Y si tu acto es comer, hará que comas menos. Tira todos tus libros de dietas a la basura y aplica este sencillo principio.

9. Si quieres seguir trabajando en un problema, siéntate recto y cruza los brazos. Esa parece ser la mejor manera para no dejar de intentar resolver el problema.

10. Sistema Pilatos. Si te sientes culpable de algo, lávate las manos o dúchate. Al sentirnos más limpios nos sentimos menos culpables. Quizá por eso todos los asesinos de las películas salen lavándose compulsivamente las manos después de haber matado a alguien. Por eso o por estar pringados de sangre, que también puede ser.

11. Para conseguir más creatividad haz un cambio de rutinas. Sal a caminar por un lugar distinto, realiza una actividad diferente, viaja. Al estar en un entorno diferente tu manera de pensar será diferente.  Si estás en libertad puedes pasar una semana en la cárcel, seguro que eso te inspira a nuevas cosas.

Y en general finge. Imagina que eres un actor que representa el papel que quieres tener tú. Si quieres ser seguro de ti mismo, actúa como si lo fueras, si quieres ser divertido actúa como si lo fueras. Si quieres ser un delincuente actúa como si lo fueras. Bueno esta última no, ahora que lo pienso. Siempre hay límites, pero en general “Actúa como si” es una política muy buena.