¿Alguna vez has pensado que las personas cambian según con quien estén hablando?
Bueno, quizá no sea solo una impresión.
La gente cambia el tono de su voz dependiendo de con quién están hablando, y si se sienten en una posición más o menos dominante, según un estudio de la Universidad de Stirling.
La investigación psicológica, publicada en la página PLOS ONE, puso a los participantes en una tarea simulada de entrevista de trabajo y descubrió que las características vocales de los individuos -especialmente el tono- se alteran en respuesta a personas de diferente estatus social.
Independientemente de la auto-percepción del estatus social, las personas tienden a hablar con personas de alto estatus usando un tono más agudo.
La doctora Viktoria Mileva, investigadora postdoctoral de la Universidad de Stirling, dijo: “una voz profunda suena dominante, especialmente en los hombres, mientras que una voz más aguda parece más sumisa. Cuando alguien percibe a su entrevistador como más dominante, usa un tono más agudo, lo cual puede ser una señal de sumisión, para mostrar al oyente que no es una amenaza, y evitar posibles enfrentamientos.
“Estos cambios en nuestro discurso pueden ser conscientes o inconscientes, pero las características de la voz parecen ser una forma importante de comunicar el estatus social.” Tanto hombres como mujeres cambiaron su tono al hablar con personas que consideraban dominantes y con prestigio “.
Los investigadores también descubrieron que los participantes que se consideran dominantes (que utilizan métodos como la manipulación, la coerción y la intimidación para adquirir el estatus social) tienen menos tendencia a hablar en un tono agudo cuando hablan con alguien de alto estatus social.
Los individuos que se consideran con mucho prestigio ( creen que las personas los admiran y valoran sus opiniones, otorgándoles así estatus social) no cambian lo fuerte que hablan, no importa con quién estén hablando. Esto puede indicar que son más tranquilos y en control de una situación.
Los participantes respondieron a preguntas introductorias, personales e interpersonales. Bajaron el tono de su voz más en respuesta a las preguntas más complejas, interpersonales, por ejemplo al explicar una situación de conflicto.
La doctora Mileva afirma: “Las señales y las percepciones del estatus social humano tienen un efecto en prácticamente todas las interacciones humanas, desde características morfológicas, como la forma de la cara, la postura corporal, el uso específico del lenguaje, las expresiones faciales y las voces.”
“Comprender lo que son estas señales, y cuáles son sus efectos, nos ayudará a comprender una parte esencial de la conducta humana”.
Los expertos creen que los cambios vocales identificados en este estudio podrían darse en situaciones en que se perciben diferencias de estatus social, como hablando con un rival en el campo de fútbol o interactuando con un colega de profesión.
Fuente:
Universidad de Stirling. “El estado social del oyente altera nuestra voz”. Ciencia diaria. ScienceDaily, 29 de junio de 2017. www.sciencedaily.com/releases/2017/06/170629101721.html
El artículo no entra en el tema, pero también hay cuestiones de género. Yo, por ejemplo, modulo muchísimo la voz cuando necesito que un hombre haga una tarea. En general lo hago de forma inconsciente, casi automática. Como bien dices, agudizo la voz, pero también bajo el tono, me acerco al susurro. No sé si es general en las mujeres :S
Tiene sentido. Las mujeres durante mucho tiempo no han podido usar la fuerza y han tenido que recurrir a trucos psicológicos para conseguir sus fines. Tu experiencia te dice sin duda que consigues mejores resultados modulando la voz, así que aplicas lo que te beneficia. Y si tuviera que apostar, diría que es muy general en las mujeres 🙂