“I ain´t afraid of no ghost”
Expresión intraducible que significa exactamente “No tengo miedo a ningún fantasma”.
Ghostbusters BSO.
Pocas cosas tienen tan mala fama como un “fantasma”. No los de la sábana y la bola de hierro, que ya no asustan a nadie, sino un fantasma de los tan propios de España ( no sé amigos de América si tienen también por allí) que aprovecha la más mínima oportunidad para contar cosas buenas de sí mismo.
Y aunque todos hablemos mal de los fantasmas, ¿quién no ha caído en alguna ocasión en la tentación de marcarse una pequeña fantasmada?. ¿Quién no estaba deseando poder contar dónde se había ido de vacaciones, que había ligado con el guapo de la clase, que había marcado un gol de tacón o que su hijo había sacado un sobresaliente en Matemáticas?.
Somos humanos y como tales, caemos periódicamente en el odioso mundo de la fantasmada. Vamos al menos a ver cómo aprender a ser un fantasma para no convertirnos en más impopulares que los miembros del Cómite Olímpico en un bar de Madrid.
¿Quién saca el tema?
1. Para ser un buen fantasma hay que esperar a que la otra persona saque el tema.
Estás en el ascensor, subes un par de pisos y la otra persona dice: ” Se acaban las vacaciones”…
Ya tienes barra libre. Que no hubiera sacado el tema. Eres libre para contar tus maravillosas vacaciones en Serranillos Playa ( Sierra de Madrid) o si eres un fantasma de más categoría, tu Safari Fotográfico del Serenguetti.
2. Pero siempre hay un “plan B”. Si la otra persona no saca el tema y tú estás impaciente por hacer el fantasma hay otra opción. Saca tú el tema, y entonces consigue que la otra persona te pregunte.
Estás en el ascensor, y la otra persona parece más interesada en mirar el marcador electrónico del piso que en tus aventuras. Puedes entonces decir ” Por cierto ¿qué tal las vacaciones…? con cara de póker y esperar a ver la reacción del prójimo. Si te empieza a contar sus aventuras, cruza los dedos para que al final, aunque solo sea por cortesía te diga “Y las tuyas ¿qué tal?”. Entonces reforzado por haber sido preguntado, puedes contar tu historia sin pudor.
En resumen:
Para ser un buen fantasma, o esperas a que el otro saque el tema, o lo sacas tú y consigues que te pregunte.
Si piensas que esto lo saco de mi larga experiencia como “fantasma” estás muy equivocado. Hay un estudio de Carmen Lebherz en el que me he basado.
¿Vas a ver el estudio original?
¿Sí?
Venga, no seas fantasma.
Jjjaja muy bien articulo Ivan, algunas personas son fantasmas, cuando crean historias poco creibles…. Pero tambien existen los vampiros emocionales, ¿Que son los vampiros emocionales?, los que nos cuentan historias y luego nos “chupan la energia”, y eso pasa mucho en los supermercados o centros comerciales, porque lo comento. Porque insconscientemente lo sepamos o no. Las personas que van a un hipermercado o centro comercial va con mucha ansiedad de compra. Imaginate la energia que puedes percibir en un ambiente asi….Son como fantasmas en el tiempo… Y si lo vemos del punto del fantasma es aquel que nos asusta y nos da miedo, o lo que es lo mismo… Entran y salen de nuestra vida sin saber porque…. Tambien existen como dices los fantasmas o lo que es lo mismo “el contador de anecdotas pueden ser creibles o no..Pero al final de cuentas todo sale a luz. Muy buen articulo, y como diria el dicho cada quien que aguante su vela….
Fantasmas, vampiros, al final las películas de fantasía tampoco iban tan desencaminadas jejeje. Vamos a tener que ir por la calle con escopetas de rayos anti fantasmas, estacas de madera y balas de plata. Un saludo Killokin.
A mí, por personalidad o costumbre, me gusta ser más el tipo de fantasma del que todos hablan pero nadie ha visto.
En todo caso, lo esencial es que la gente se meta en su propia ratonera hablando de algo o tomando la iniciativa.
Si ese es tu objetivo, desde luego que lo consigues con creces no se te puede negar jejeje.