“Lucha siempre, lucha hasta el final. Pero antes de luchar no olvides pensar para qué estás luchando”.
Siempre he sido partidario de “luchar hasta el final”. Considero que tengo bastante capacidad de lucha y es quizá de los rasgos de mi personalidad, del que me siento más orgulloso. Y sin embargo quizá esté totalmente equivocado. Quizá en algunas ocasiones haya luchado como un soldado.
Luchar como un soldado
Un soldado no se plantea el porqué está luchando. Tiene unas órdenes y las cumple. Si tiene que dejarse la vida en la batalla lo hace, porque retroceder no es una opción para un soldado. Pensar tampoco es algo que un soldado necesite hacer. Lo que vale un soldado se mide por su capacidad de cumplir con las órdenes y por su valor al ejecutarlas.
Luchar como un general
Un general se plantea para qué entra en combate. Tiene unos objetivos, pero él decide como cumplirlos. No arriesga su vida en la batalla, y siempre tiene que pensar. Para un general no es una infamia ordenar una retirada si resulta que con eso consigue sus objetivos de manera más eficiente. El valor de un general se mide por su capacidad para tomar decisiones y por el éxito de esas decisiones.
Lo he llamado general, pero podría haber hecho referencia a un emperador, a un rey ( de los de espada y manto de armiño) o a cualquier otro término. Alguien que manda el ejército y no forma parte de el.
¿Cómo luchar de la manera adecuada?
Hay que luchar sí. Pero hay que saber cómo luchar de la manera adecuada.
Hay que definir los objetivos,
hay que establecer una estrategia
luego hay que determinar que tácticas servirán para esa estrategia,
y solo entonces hay que luchar.
Lucha de forma fiera, de forma intensa, sin dejarte nada dentro, con toda tu energía sí…
pero no hasta el final.
Nada es hasta el final.
Quizá en mitad de la lucha te des cuenta de que no tiene sentido, o que deberías haber intentado otra cosa, o que sería mejor de otra manera. Quizá te has dado cuenta de que has puesto tu castillo de arena en el lugar inadecuado.
La diferencia entre un soldado y un general es que un soldado nunca se para en mitad de la lucha. Un soldado sigue y sigue como el conejo de duracell, sin parar nunca. Un general se ha de parar a cada paso y pensar “¿Estoy haciendo lo correcto?”. ¿Cómo lo haces tú?.
¿Luchas como un soldado o luchas como un general?
¿Tienes establecidos periodos para reflexionar sobre si estás siguiendo el curso adecuado o no, o simplemente actúas por impulso?.
No es malo ser un soldado, pero quizá algún día de estos puedas plantearte, como me estoy planteando yo, si no sería conveniente darte a ti mismo un ascenso y hacerte general.
También unos de los rasgos que me caracterizan es el de luchadora, la verdad a veces pienso que para según que cosas no es demasiado bueno, no voy a contar la cara (de pringadaaaa)que se me ha quedado en algunas ocasiones, por no tirar la toalla a tiempo.Mucha gente me dice es que eres una luchadora , a veces no tengo ni idea por que me lo dicen , sólo se que me he sentido agotada en ciertas ocasiones , me he dado una y otra vez contra una pared y ahí seguía luchando, no si si es espiritu de lucha, obstinación, o que gustaba flagelarme . Ya me he ido dando cuenta de que a veces hay que parar y no seguir en luchas que no sirven para nada…¡¡ pero este articulo me acaba de ascender a general y desde luego luego en cada batalla me parare mas a menudo a reflexionar !! .. Me ha encantado el articulo.. saludos
Muchas gracias Ishi. Como te puedes imaginar Ishi si he hecho el artículo es porque es algo que a mí me ha pasado muchas veces. Un saludo.
Hoy hemos madrugado,hemos ido al quinto pino a jugar un partido que hemos perdido y que podíamos haber ganado bien,
¿cómo hemos luchado?
como soldados,SIN REACCIONAR cuando ya perdíamos 0-3
Lo resalto en mayúsculas pq para mí la clave para conseguir un objetivo es reaccionar cuando algo va mal y rectificar sea cual sea el punto en el que nos encontremos y eso es tarea del general.
Haces bien en ascenderte 🙂
Pero fíjate Isara que todos deberíamos ser generales. Todos podemos serlo, si nos damos cuenta de que no basta con ser soldado.