En su libro la ciencia de la felicidad, Sonya Lyubomirsky dice que hay tres factores que influyen en la felicidad.
La disposición genética influye un 50%. Hay gente que tiene una mejor disposición para ser feliz.
Las circunstancias influyen solo un 10%.
El restante 40 % dependería de nuestros actos y pensamientos.
Sean o no exactos los porcentajes, lo que parece claro es que si conseguimos hacer las cosas bien tenemos muchas posibilidades de ser felices.