— Rafael Sarmentero (@rafasarmentero) March 3, 2016
Rafael Sarmentero (RafaelSarmentero.com) es un gran poeta. Pero sobre todo es alguien que sabe quién es.
Cuando éramos pequeños
De pequeño yo sabía lo que quería ser. No era muy original: como casi todos los niños de mi edad, quería ser futbolista. No por dinero, porque entonces no ganaban tanto. Era más bien por poder dedicarme a lo que me gustaba hacer en los recreos. Llegué a intentar apuntarme a unas pruebas para el equipo de mi ciudad. Ni siquiera me llamaron para hacerlas.
Creía que sabía lo que quería ser. Pero saber lo que uno es, es algo mucho más complicado.
Descubriendo lo que quiero ser
Quedaría muy bien decir que durante mucho tiempo estuve perdido, pero ahora sé lo que soy realmente. Pero no lo sé. Las historias de “era un idiota y ahora soy maravilloso” venden muy bien. Porque todo el mundo se siente idiota en el fondo, y en el fondo todo el mundo quiere ser maravilloso.
Pero odio la imagen del sabio al final del camino, del que ya tiene todas las respuestas y pontifica sobre ellas.
Aún no sé lo que quiero ser. Aún no sé lo que soy. Sé cual es mi trabajo, sé de algunas cosas que son muy importantes para mí , sé cosas que me gustaría lograr. Pero no sé totalmente lo que soy. Me queda trabajo por hacer.
Siempre he creído que se trataba de descubrir lo que eres. Como si hubiera una manera secreta de ser que todos tuviéramos escondida y tuviéramos que escarbar la tierra para encontrarla como un perro buscando un hueso.
Quizá no es así. Quizá en realidad lo que somos es, como dice Sarmentero, una decisión. Algo que elegimos y que nos obligamos a cumplir. No algo que nuestra naturaleza nos impone a nosotros, sino algo que nosotros imponemos a nuestra naturaleza.
No se trata de descubrir quién eres. Se trata de decidir lo que eres y obligarte a actuar en consecuencia.
— Iván (@Entusiasmadocom) March 4, 2016
¿Qué quieres ser? ¿qué eres?
Aunque parecen preguntas distintas, son la misma pregunta. Lo que quieres ser depende inexorablemente de lo que decides ser desde ahora mismo.
Y no te hablo de la profesión, del trabajo. En el fondo eso no es tan importante.
Hay cosas más esenciales que tienes que decidir.
¿Qué tipo de persona quieres ser?
¿Quieres ser alguien que luche por lo que le importe o alguien que se resigne?
¿Quieres ser alguien que cumpla su palabra o alguien que busque solo su interés?
¿Quieres alcanzar la gloria o quieres vivir una vida tranquila?
Decídelo. Crea la persona que eres. Pero no te valdrá con eso.
Caminando hacia tu propio ser
Decidir lo que vas a ser es solo una parte del trabajo. Después tienes que conseguir que cada acto que realices sea un paso que te dirija a tu objetivo. Tienes que llenar tu vida de intención.
No va a ser fácil. La vida no suele ser fácil. La vida te exige constantemente sacrificios para poder cumplir tus propósitos. Por eso tu vida es la mayor y más complicada de tus obras de arte.
Dice el poeta:
“Toda mi vida orientada a un objetivo:
Ser el que quiero ser”.
Pregúntate cada momento de tu vida: “¿Me está acercando esto a ser el que quiero ser?”
Espero que sí.
Ah y no te hagas vegetariano. Esta riquísima la carne.
Me ha gustado esta frase que escribiste,
así que la “Dividí” para vencer, no solo para comentarte
jajajaja…
“No se trata de descubrir quién eres.”
uno ya sabe quién es…
“Se trata de decidir lo que eres…”
se trata de decidir no hacer lo que los demás creen que eres…
“y obligarte a actuar en consecuencia.”
esta parte me gusto y es la clave de todo…
que simple era…
Gracias un abrazo
Iván Disfruta
mi nuevo nick gracias a tu pagina
Sí, tienes razón, eso es lo esencial. Es muy difícil, pero creo que es un esfuerzo al que merece la pena dedicar la vida.
que bueno ivan excelentes palabras!…me cayo como anillo al dedo tu pagina, justamente estoy en una etapa de mi vida que necesito definir quien quiero ser..
Mucha suerte con ello Lucas. Espero que te vaya todo muy bien.