¿Por qué a veces nos sentimos mal?
Gran parte de los esfuerzos de la sociedad moderna están encaminados a eliminar el malestar. Si te sientes un poco incómodo, puedes salir a divertirte, tomarte una copa, o una pastilla. En el caso de que te sientas especialmente deprimido puedes recurrir al Prozac. En algunos países se ha llegado a hablar de Prozacnation ( la nación Prozac) por la frecuencia de uso de este antidepresivo.
Parecería que de esas maneras se consigue eliminar el malestar, y mejora la vida. Pero ¿ y si resulta que todo malestar es un síntoma de un mal mayor?.
Con el dolor físico lo tenemos más claro. Cuando te duele una muela, puedes usar un analgésico para que te duela menos, pero eso no evita que sepas ( aunque te desagradade) que tienes que visitar al dentista para solucionar el problema de base.
¿Y el dolor psicológico, que significa?
Al igual que el dolor físico es un instrumento que nos muestra la existencia de un problema mayor, el dolor psicológico también muestra que algo no lo estamos haciendo según la naturaleza tiene previsto.
Y fíjate que hablo de la naturaleza, no digo que sea necesariamente algo que nosotros creemos, o algo que debería ser. Nuestros genes nos “programan” para actuar de una determinada manera y si lo hacemos así, entonces han de buscar la manera de hacer sonar una alarma, de indicarnos con un pitido desagradable que nos estamos desviando.
Lo que caracteríza a todos los sistemas de alarma, desde un despertador, hasta la alarma de una casa, es que producen una sensación incómoda. No hay ninguna alarma con música relajante, porque la finalidad no es que te sientas bien, sino al contrario que te sientas mal para llevarte a actuar.
Lo mismo ocurre con el dolor que sentimos en ocasiones en nuestro ánimo. Es un mensaje, una alarma que se dispara y nos dice: “Atención, hay algo que no estás haciendo bien, espabila”. Desoir ese dolor es tan absurdo como taparse los oídos cuando suena la alarma de tu coche.
¿Cómo actuar cada vez que te sientes mal?
Puedes sentirte mal por muchas cosas. Porque un amigo te ha traicionado, porque una persona a la que quieres se ha acostado con otra, porque no has conseguido un ascenso, porque tu libro no ha tenido éxito, porque no resultas atractivo al sexo contrario ( o al mismo según los casos).
Cada vez que te sientes mal hay un mensaje. Visualiza el símbolo del mensaje que ves en tu móvil cuando alguien te envía un sms. Hay algo que debes atender. Piensa que puede ser y que manera puedes tener de solucionarlo. De solucionar el problema de base y no solamente el síntoma.
Al fin y al cabo si estuvieras conduciendo tu coche, y vieras en el cuadro una luz amarilla que indica que algo no funciona no querrías quitar la luz y dejar el problema mecánico sin resolver. Y si no lo haces con un coche, ¿por qué crees que lo puedes hacer contigo?
Es verdad,si no eliminamos el problema de raíz,los síntomas se pueden disimular,pero vuelven a salir.
Pero creo que no siempre depende sólo de nosotros el solucionar el problema y ahí es cuando nos crea más tensión o malestar.Cuando tú intentas solucionar y ves que otras partes no intentan nada 🙁
Mi ánimo se deteriora bastante en esos momentos la verdad aunque supongo que lo compenso con paciencia y “palante”.
Hay personas que parece que tienen interés en crear problemas y no en solucionarlos. Lo único que hay que pensar es que ellos se soportan siempre y nosotros los soportamos solo a veces.
Si algo he aprendido con tu blog y con el de otros ilustres compis que suelen comentarte por aqui, es que si hay algo que no te gusta en tu vida, que te provoca ese malestar, puedes hacer dos cosas: o callar esa alarma con parches de escape ( antidepresivos, drogas, adicciones) y convertirte en un frustrado que no controla su vida; o echarle huevos, reconocerlo y cambiarlo, pues casi siempre eres tú el único responsable y capaz de arreglarlo. Yo lo he hecho a lo largo de este año en cosas que no me gustaban de mi mismo, y de verdad que da gusto recuperar el control y sobre todo saber que eres capaz de ello.
Un afectuoso saludo Iván, que sepas que te he mencionado en mi entrada de hoy, me has convertido en un lector habitual ¡Y espero seguir siendolo en este 2014!
Ya lo había visto Alita. Muchas gracias. Tú sabes que a mí también me gusta tu blog. Feliz 2014.
Comprender el estado emocional, es comprender y reconocer hasta que punto ese mal ha sido parte de un desequilbirio psiquico, psicologico o parte de algo que hemos pensando que alguien nos ha realizado pensar de una manera o otra
Cuando conoces y comprendes, reconoces y te liberas.
Así mismo es.