Seamos realistas. A nadie le gusta que le digan que no. Y en realidad no importa mucho de que se trate. No te gusta que te digan que tu poema no es bueno, no te gusta que te digan que no compran tu producto, no te gusta que te digan que no sales bien en la foto y sobre todo, no te gusta que una persona a la que le gustas te diga que no.
Pero estamos equivocados.
Es bueno que te digan que no. Es muy bueno.
Cuando alguien te dice que no, te está dando una indicación. Supón que estás en una ciudad y quieres ir a un lugar. Coges una calle muy larga y le preguntas a una persona “¿voy bien por aquí?”.
Es obvio qué es lo mejor. A todos nos gustaría que nos dijera que sí. Entonces sería muy fácil. Sólo tendríamos que seguir esa calle y llegaríamos a nuestro destino.
Pero lo peor no es que te diga que vas mal. Lo peor es que te diga que no sabe, o que se gire y no te responda. Porque eso no te ofrece ninguna información sobre lo que está ocurriendo. Eso no te dice nada. Y sin saber nada, no sabes si estás yendo o no en la dirección correcta.
Los caminos que no llevan a ningún lado y los que llevan a alguna parte.
En la vida hay muchos caminos que no llevan a ningún lado que te interese. Y hay algunos ( muchos menos) que sí llevan donde tú quieres llegar. Cada vez que escuchas un “no” estás descubriendo uno de esos caminos que no llevan a ningún lado. Y por tanto estás reservando energías y tiempo para dedicarte a encontrar los caminos que llevan a alguna parte. Por eso deberías estar contento.
En el fondo, como muchas veces hemos dicho, todo resultado es información. Información que te dice donde estás. Y la peor información no es la que no te gusta. La peor información es la que nunca recibes. La que te deja ciego y sordo, a tu suerte.
Si te dicen no, da las gracias, sonríe y dedica tu tiempo no a lamentarte, sino a buscar los caminos que te llevan al sí.
Que Bonito!!! 😀 Cuanta Razón 😀 “Muchas Gracias” !!! 😀
Excelente… Me dejo un mensaje muy profundo. FELICITACIONES
Muchas gracias Carlos.
Muchas gracias Mary Lopez.
Hola