¿Son las nuevas generaciones menos inteligentes?
Un nuevo estudio realizado por científicos noruegos, muestra que los cocientes intelectuales de los jóvenes de hoy están disminuyendo, poniendo fin a la tendencia anterior.
Después de la Segunda Guerra Mundial, el coeficiente de inteligencia de los jóvenes estaba en constante aumento. Fue llamado el efecto Flynn en honor del investigador de inteligencia de Nueva Zelanda, James Flynn. El cociente intelectual medio aumentó como tres puntos por década.
Pero las investigaciones del Centro de Investigación Económica Ragnar Frisch en Oslo dicen que el efecto Flynn ya ha pasado su punto máximo. En un artículo publicado en la revista PNAS, los científicos noruegos Ole Rogeberg y Bernt Bratsberg analizaron los datos de las pruebas estandarizadas de cociente intelectual de aproximadamente 730,000 hombres, nacidos entre 1962 y 1991, que se sometieron a pruebas obligatorias de cociente intelectual para unirse al servicio nacional.
El estudio reveló que los puntos de cociente intelectual de los que se analizaron alcanzaron su máximo enlos nacidos en 1975, mientras que las personas nacidas en 1991 consiguieron cinco puntos menos.
¿A qué se debe ese cambio?
Según los científicos, este cambio podría deberse a muchos factores, incluida la forma en que los niños crecen y se educan. Por ejemplo, hay menos ejercicios en matemáticas e idiomas, y la cantidad total de tiempo dedicado a ver televisión o usar tecnología ha aumentado.
Sin embargo, el Dr. Ole Rogeberg enfatizó que un coeficiente de inteligencia bajo no necesariamente debe interpretarse como estupidez, sino más bien como niños que se adaptan a la nueva realidad de la tecnología digital, y a habilidades que no pueden comprobarse o evaluarse tan fácilmente mediante una prueba de cociente intelectual estandarizada.
“Los investigadores de inteligencia hacen una distinción entre inteligencia fluida y cristalizada“, dijo. “La inteligencia cristalizada es algo en lo que se te ha enseñado y entrenado, y la inteligencia fluida es tu habilidad para ver nuevos patrones y usar la lógica para resolver problemas novedosos”.
Una cosa que el estudio descartó es que la disminución del cociente intelectual estén relacionados con mutaciones genéticas o que se deriven de un cambio demográfico. Investigadores noruegos analizaron familias enteras y hermanos en un intento de encontrar cualquier rasgo común de deterioro mental, pero no encontraron ninguno.