La fantasía de san Nicasio
Las navidades pasaron. Papa Noel se marchó en su reno, los reyes magos se fueron en sus camellos. Pero hay algo que permanece: los kilos que hemos engordado estas navidades.
¿Qué haremos para quitárnoslo?
¿Comer menos? ¿hacer ejercicio?
Algunos tienen una solución más sencilla.
Rezar a san Nicasio.
Es una broma que circuló por internet hace unos días. Pero detrás de esa broma, hay una mentalidad absolutamente equivocada. En honor a San Nicasio voy a llamar a esa mentalidad fantasía de san Nicasio.
¿Qué es la fantasía de san Nicasio?
Todos queremos mejorar. Queremos ganar más dinero, encontrar una persona muy atractiva, mejorar nuestra posición social, ser los primeros en pisar Marte.
Pero hay un problema, para pasar del estado actual a uno mejor, hay que hacer un esfuerzo. Para subir has de superar una pendiente.
Alguna rara vez puedes subir por un atajo a un estado más deseable. Te puede tocar la lotería, te pueden llamar de un concurso de televisión para cantar y hacerte extremadamente famoso. Puede ser que alguien fabulosamente atractivo te encuentre en una isla desierta y se enamore de ti.
Pero admitámoslo, es muy difícil. Y en algunos casos ni siquiera existe esa posibilidad remota. No puedes ser presidente de tu país sin presentarte, no puedes adelgazar si sigues comiendo lo mismo.
Necesitas superar una pendiente para llegar a un estado superior.
Y el problema es que a nadie le gusta hacer esfuerzos. Solo tienes que ver el inmenso éxito que tienen todos los aparatos que se venden en la televisión a las tantas de la madrugada para tener una tableta sin hacer abdominales.
Nos gustaría quedarnos en el sofá y conseguir nuestras metas por arte de magia.
Eso precisamente es la fantasía de san Nicasio, creer que podemos mejorar sin esforzarnos.
El talento está sobrevalorado
En su famoso libro El talento está sobrevalorado, Geoff Colvin nos contaba que los más destacados en campos tan distintos como la música o el tenis, se han preparado de una manera más intensa y eficaz los demás.
Como decía Thomas Edison, ” el genio es un 1% inspiración y un 99% transpiración”.
Nos enseñaron que Newton descubrió la teoría de la gravedad cuando le cayó una manzana en la cabeza y que Arquímedes elaboró su teorema en la bañera. Pero olvidamos que fue ( en el caso de ser cierto) la consecuencia de muchísimas horas de trabajo.
Mozart era hijo de un músico. Tiger Woods era hijo de un golfista que empezó a enseñarle desde pequeño.
Incluso cuando un genio parece surgir de la nada se acaba descubriendo que no es así. El poeta Miguel Hernández se había considerado como un pobre pastor autodidacto. Sin embargo, se ha descubierto que ni era pobre ni aprendió solo, ni era solo un pastor.
Solo en nuestras fantasías ( sexuales y no sexuales) somos capaces de hacer algo maravilloso sin habernos preparado.
Sin esforzarnos no solo no mejoraremos sino que caeremos a un estado inferior. Todo lo que no sube, acaba bajando. Si no mejoras tu cultura, disminuirá por el olvido. Si no aumentas tus habilidades en tu trabajo, te quedarás desfasado. Si no mejoras tu estado de forma acabará deteriorándose aún más.
Buenas intenciones
Algunos se defenderán ( nos defenderemos) diciendo “bueno, no hago nada ahora pero voy a hacer esto y aquello”.
Recuerda algo:
Lo que quieres no es tan importante como lo que decides.
— 1/4 Century (@Mario55840) January 10, 2017
Y yo lo llevaría más lejos.
Lo que quieres no vale nada. Es lo que haces lo que importa.
Esfuérzate o no te esfuerces, pero no sueñes. Si no haces nada, no conseguirás nada.
San Nicasio no va a bajarte la barriga, te la vas a tener que bajar tú solo.
Me he reído mucho con: “San Nicasio, San Nicasio bájame la barriga sin ir al gimnasio”. Pero lamentablemente es la realidad de muchos. Tienes mucha razón al decir que el que no mejora, empeora. Pues todo en este mundo está en constante movimiento. ¡Así que para atrás, ni para tomar impulso!
Siempre avanzando, aunque sea poco, porque la dinámica del movimiento nos da fuerza para otros cambios. Un saludo Wendy.
Querido amigo, unas cuantas líneas para comentar: Es una batalla perdida el tratar de mejorar a quien no quiere mejorar, tu ejemplo de San Nicasio es perfecto, quiere mejorar sin hacer nada.
Lo Mismo pasa con el minimalismo, quieren mejorar sin practicar.
Salvo que respecto a la ingesta, se debe de comer en proporción a lo que se gasta, no comer y luego desgastar, pues lo que consigues es más musculatura, y mas peso en consecuencia.
Un saludo
Alberto Antonio