Recuerdo un curso que hice hace poco en internet de creatividad. Una de las primeras cosas a las que se daba importancia es a la configuración del espacio de trabajo. El lugar donde trabajas ha de estar muy bien adaptado a tus necesidades. Me llamó la atención especialmente la idea de que el espacio de trabajo ha de tener un punto muerto, un estado neutro.
¿Qué es el punto muerto?. Cómo en la palanca de cambios de un coche un punto muerto es el lugar donde está el cambio de marchas cuando no está en ninguna marcha determinada. La palanca ( en los coches manuales ) puede estar en segunda velocidad, en quinta, en marcha atrás, pero cuando no está en ninguna de ellas debería estar en el punto muerto.
El punto muerto es el estado de reposo, la posición de partida: El punto de retorno. Y normalmente en la vida no lo tenemos bien determinado ni configurado.
El punto muerto de tu lenguaje corporal
Puedes saltar, reír, bailar, llorar, o hacer lo que te toque hacer en cada momento. Pero cuando todo eso acaba ¿Tienes claro tu punto de partida?. ¿Sabes cuál es la posición neutra de tu cuerpo?. ¿Dónde tienes las manos cuando no tienes nada que hacer?. ¿Cómo caminas de erguido?. ¿Dónde se coloca normalmente tu mirada?, ¿ a la altura del suelo? ,¿a la altura de tus ojos en paralelo al suelo?, ¿por encima de la linea de tus ojos?. Y tu boca ¿normalmente cuando no hay ningún suceso que te afecte ¿sonríes?, ¿estás mas bien serio? , ¿tienes una media sonrisa?.
Posiblemente no seas consciente de eso. Y si no lo eres quizá el efecto que produzcas no sea el que quieras. O quizá incluso tengas el problema de que te resulte más complicado volver a una posición neutra después de los problemas que te encuentres.
El punto muerto de tu estado de ánimo
Y lo mismo puede pasar con tu estado de ánimo. Cómo es tu estado de ánimo cuando dejan de batir las olas sobre ti. Cuando no estás ni especialmente contento ni especialmente triste. Ese punto muerto del estado de ánimo es una especie de paisaje de fondo de tu vida.
Quizá no te llame tanto la atención como los picos y los abismos de tu estado de ánimo, pero es aún más importante, porque cuando no estén ni las cosas que aumentan mucho tu felicidad ni las que las disminuyen, ese será el estado de ánimo en el que te encuentres.
Interesante idea. Para los que nos pasamos la vida acelerados, al menos mentalmente, estaría muy bien identificar ese punto muerto o punto de serenidad.
Excelente Post¡¡ A mi me ha encantado, sabes? no había tenido en cuenta nunca ese kilometro 0 y a partir de ahora no sólo estaré yo más atenta a ver qué cara pongo cuando estoy distraída si no, que transmitiré ese mensaje. Porque el punto de partida de nuestras emociones es importantísimo…quizás a veces el camino se tuerce porque arrancamos desde el lugar equivocado…
Un abrazo Iván…eres un gran descubrimiento¡
Muy curioso, todos tenemos que buscar el semáforo rojo que nos haga parar.
Yo diría que cuando el semáforo lo veamos en ambar,ya podemos ir frenando nuestro ritmo,es un aviso para ir al estado de reposo.
Es un estado de desconexión física y mental y no sabría decir cuál es la posición neutra de mi cuerpo,tal vez la mirada ligeramente desviada hacia arriba.Me fijaré.Yo diría que el estado de reposo de mi estado de ánimo es por encima de la linea de reposo pq no depende de cómo las cosas son sino de cómo las veo, y yo las veo como las veo,siempre buscando que la parte positiva pese más que la negativa.
Muy bueno!!
Claro Isara, cada uno tiene su punto muerto en un lugar. Algunos en un estado de semi tristeza, y otros de cuasi-alegría. Y se puede cambiar, pero siempre sabiendo antes cuál es. Semáforos rojos hay muchos, lo complicado es encontrar como dices tú el ámbar.
Es el lugar de reposo eres un observador que puedes ver a tu alrededor que camino tomar
muy bien descrito