Seamos realistas. Todos sabemos que la foto que una persona pone en internet no refleja siempre exactamente a la persona. Las fotos suelen ser la versión idealizada y escogida de nosotros, normalmente en el momento en que éramos algo más jóvenes, teníamos menos peso, o algo más de pelo.

En ocasiones la imagen no corresponde siquiera a la misma persona.  En un famoso programa de televisión de estados unidos el presentador va con una de las personas que ha entablado una relación por internet a ver a la otra persona. La sorpresa suele ser grande y desagradable. En lugar de un chico muy atractivo aparece alguien con un tremendo sobrepeso. En lugar de una chica muy guapa, se trata de un chico que no se atrevía a confesar su homosexualidad. Pero no es necesario irnos a casos tan extremos, para ver lo mentirosas que pueden ser las fotos.

¿De verdad es la misma persona?

En ocasiones las mismas fotos de una persona realizadas en el mismo momento son valoradas de manera totalmente distinta. Eso es lo que se ha comprobado en un estudio de 2014 (Todorov y Porter). En ese estudio los investigadores discuten los resultados de otros estudios anteriores. Y afirman que no se puede hacer una valoración general de la impresión que produce el individuo, basándose en una sola imagen.

En este estudio, compuesto de diversos experimentos se demuestran varias cosas:

1. Las imágenes del mismo individuo pueden producir diferentes impresiones. Tan diferentes e incluso más que las fotos entre individuos diferentes.  En este estudio se usaron fotos en las mismas condiciones de luz, pero con diferentes expresiones faciales.

2. La valoración de las fotos depende del contexto. La foto que puede ser valorada muy bien en una web de citas, puede tener una mala acogida en una campaña política y viceversa.

3. Que esa diferente valoración de las fotos aparece incluso después de enseñar las imágenes por un tiempo extraordinariamente breve. (40 ms).

Conclusiones.

Me parece interesante ver un estudio que apoye una sensación que siempre he tenido. Y es que un cambio muy leve en una imagen, puede producir un efecto muy grande. Saber que según como sea la foto puedes pensar cosas diferentes de una persona hace que por un lado relativicemos el efecto que en nosotros mismos produce la foto de otra persona.

Por otro lado, debería llevarnos también a ser más cuidadosos en la selección de las fotos que mostramos a los demás según la impresión que queramos producir. Si después de todo eso, quieres tener una foto de perfil perfecta, aquí puedes descubrir cómo.

En todo caso, no te fíes de las fotos de internet.