Como tener talento ( 2) práctica profunda.

 

Práctica profunda

Has de practicar, pero de la manera correcta

En el anterior post sobre como tener talento (1), comentábamos que había tres elementos esenciales del talento para Dan Coyle en su libro “Las claves del talento” ( The talent code):

Práctica profunda.

Ignición

Y "Master coaching"

Y respecto a la práctica profunda vimos la importancia de A) encontrar el punto dulce y b) la fascinante función de una sustancia llamada mielina que recubre las conexiones neuronales y las hace funcionar mucho más rápido y de manera más coordinada.

Así que seguiremos examinando la práctica profunda.

C) No existe el genio, existe el esfuerzo.

i). Ejemplos famosos de práctica continua.

Algunas de las obras más famosas de la literatura inglesa ( como "Jane Eyre" o "Cumbres borrascosas" fueron escritas por las hermanas Bronte ( Charlotte, Emily, and Anne) antes de morir bastante jóvenes.

Tradicionalmente siempre se había pensado que todo era debido a su genio. Se daba por hecho que habían nacido en un entorno distante y hostil y que estaban especialmente dotadas para la literatura, lo que habían demostrado desde una temprana edad.

Sin embargo parece que no fue así. La ciudad donde vivieron era un nudo de comunicaciones bastante importante, el entorno fue favorable con libros y bastante estimulación, y lo que es más importante,  si bien empezaron a escribir muy pronto, sus primeras obras dejaban bastante que desear.

Examinando con detalle sus escritos se ve que no empezaron siendo geniales, sino que fueron poco a poco aprendiendo hasta hacerse geniales.  Así los elementos de “Cumbres borrascosas” ya estaban presentes de diversas formas en todas las obras de menor calidad que Bronte había escrito con anterioridad.

Es curioso como al ser humano le gusta crear héroes, y pensar que la habilidad es un talento divino, algo que no está al alcance de los demás. Quizá porque el sudor del esfuerzo no queda tan bien como el haber sido elegido por los dioses. O quizá porque pensar que el talento es algo que depende de circunstancias ajenas a nosotros, nos libera de la culpa de pensar que también nosotros podríamos haber llegado al mismo destino si hubiéramos puesto el mismo trabajo.

Eso mismo que Coyle dice de las hermanas Bronte es lo que Geoff Colvin en su libro “El talento está sobrevalorado” ( “Talent is overrated”) afirma de Mozart o de Tiger Woods. Tanto el uno como el otro tenían padres que se dedicaban al mismo campo en el que luego ellos sobresalieron.  Desde pequeños estuvieron practicando y cuando llegaron a ser conocidos a una edad muy joven ya llevaban mucho tiempo de práctica a sus espaldas.

Especialmente revelador también en ese sentido es el famoso experimento de las hermanas Polgar. El padre de estas hermanas que revolucionaron el ajedrez femenino había decidido precisamente tener unas hijas y hacerlas excelentes ajedrecistas, aún sin serlo él, para demostrar que cualquier persona debidamente entrenada puede llegar a conseguir un rendimiento muy elevado en cualquier campo.

ii). Épocas mágicas.

Para Coyle hay en la humanidad diversas épocas en las que el número de peronas con talento en un determinado lugar es impresionante, sobre todo tres Atenas de el 440 al  380 antes de Cristo,  Florencia del 1440 al 1490, y Londres de 1570 a 1640.

Posiblemente el motivo del surgimiento de tantos genios en una época determinada está en el sistema de aprendizaje. Así lo afirma Coyle poniendo como ejemplo el sistema de aprendizaje de Florencia.

Para la época de la Florencia renacentista  Bruce Cole en su libro “El artista renacentista trabajando” ( “TheRenaissance Artist at Work)" afirma que “El sistema de los aprendices, con su largo periodo de estudio, toma de contacto temprana con los diversos materiales, copia y trabajo colaborativo,  permitió que chicos que eran posiblemente bastante ordinarios en todos los sentidos, se convirtieran en hombres con un alto grado de habilidad artística”.

Un claro ejemplo de ese sistema es Miguel Angel que ya desde los seis años empezó a vivir en la familia de un artesano de la piedra, y pasó por todas las fases del aprendizaje hasta que llegó a esculpir el David o La Piedad.

« Si la gente supiera lo duro que tuve que trabajar para ganar mi maestría, no parecería todo tan maravilloso. » Miguel Angel.

Deja de engañarte, el talento no es un regalo, el talento es algo que hay que ganarse practicando, luchando, trabajando. Y para eso es necesario practicar.

 

práctica profunda reglas

nadie dijo que fuera fácil

D) Las 3 reglas de la práctica profunda:

La práctica profunda se ha de realizar de la manera adecuada, y para ello se han de seguir tres reglas según Coyle:

 Regla número uno: División en pequeñas porciones.

Para realizar esta división primero se mira el conjunto. Podemos mirar la actividad realizada por una persona con maestría e imaginarnos que somos capaces de hacerla al mismo nivel.

Después se divide en pequeñas partes ( circuitos) que se trabajan individualmente, luego progresivamente se agrupan ( circuitos interconectados).

El trabajo de esas partes pequeñas se tiene que hacer de manera muy lenta. Así se consigue por un lado ser más consciente de los errores y poder corregirlos y llegar a la perfección, y por otro lado se consigue una mayor sensibilización de la persona a la actividad que está realizando.

Tan importante es la manera en que se practica que en un estudio Barry Zimmerman fue capaz de predecir al 90% el nivel de habilidad en el saque de unos jugadores de voleibol, sin haberlos visto jugar, solo por la información que ellos mismos dieron sobre su manera de practicar.

 Regla dos . Repetición en la zona dulce . Nada es equivalente a la repetición.

El pianista Vladimir Horowitz que seguía practicando aún con 80 años dijo:

“ Si dejo de practicar un día lo noto yo. Si dejo de practicar dos días lo nota mi mujer. Si dejo de practicar tres días lo nota el mundo".

Sin embargo no se trata de repetir de manera inconsciente y rutinaria. Se trata de repetir estando en el punto dulce en el que actúas con cuidado, como si caminaras sobre una capa de hielo. Y eso no puede hacerse por demasiado tiempo. Entre 3 y 5 horas es el máximo que se considera que se puede practicar así, pero muchas veces basta con una hora de práctica si está realizada de una manera adecuada.

Regla número tres: Sentirlo.

Al ir practicando ,poco a poco, comienzas a desarrollar la capacidad de descubrir cuando estás haciendo las cosas mal, y cuando las haces bien. Ha de ser el equivalente a un músico que se sienta incómodo cuando una nota esté fuera de lugar. Es un esfuerzo consciente de saber cuando has tropezado.

La práctica profunda ( que coincide con lo que George Colvin llamaba la práctica deliberada) es para resumirlo como un niño que empieza a caminar. Al principio es duro y el niño se cae, pero es precisamente el niño que le dedica más tiempo y que lo sigue intentando de la manera adecuada arriesgándose a caer el que es capaz de caminar primero.

En un post posterior hablaré de los otros dos elementos esenciales para el talento: la ignición y el “master coaching”.

Cómo tener talento ( 1)

 

habilidades

Como estas esferas, cada habilidad es diferente pero todas se basan en lo mismo

A todos nos gusta aprender cosas. A veces aprendemos un tipo de habilidad y a veces otro, pero hay algo que es común a todas las habilidades y es el proceso por el que se aprenden. Dan Coyle en su libro "Las claves del talento" ( The talent code)  ha estudiado todos los elementos que llevan a adquirir alguna habilidad.

Para realizar su estudio  Coyle ha examinado las escuelas de tenis que con pocos recursos son capaces de conseguir los mejores resultados, los lugares donde se descubre a los mejores bateadores, los colegios en los que hay un mayor porcentaje de niños que acaban yendo a la universidad.

Tras todos esos estudios Dan Coyle se ha dado cuenta de que el talento no es algo con lo que se nace, sino que es algo que se adquiere. Conociendo la manera en que aprenden los mejores de cada especialidad, podremos ser capaces de tener talento en cualquier campo al que nos dediquemos.

 

¿Qué es una habilidad?.

La definición que hace Dan Coyle de una habilidad es una definición revolucionaria. Para ello se basa en la mielina.  En nuestro cerebro cualquier aprendizaje se concreta en fibras nerviosas que llevan un impulso eléctrico. La mielina es una sustancia que segrega nuestro organismo y que produce un efecto aislante de esa conexión que la hace más fuerte y que evita que haya fugas. Tiene una función parecida a la función de la goma que rodea un cable de cobre.

Por ello Coyle define la habilidad como : un aislamiento celular que envuelve los circuitos neuronales y que crece en respuesta a determinadas señales.

Cuanto más tiempo y energía pongas en el tipo adecuado de práctica ( no en cualquier práctica sino en la práctica adecuada) más habilidad adquirirás, o lo que es lo mismo, más mielina generará tu cerebro.  Y eso es válido para cualquier tipo de habilidad. Sea de la clase que sea.

 

¿Qué se necesita para adquirir una habilidad?

En opinión de Coyle se necesitan tres cosas:

1. Práctica profunda

2. Ignición

3. Coaching para la maestría.

Esas tres cosas se han de mezclar para que el aprendizaje sea el adecuado.

  1. Práctica profunda.

 

A)     El punto dulce

Muchas veces pensamos en el entrenamiento como en la práctica de nuestras habilidades de forma perfecta.  Sin embargo la realidad es otra. Si todo nos sale perfecto es muy posiblemente señal de que estamos haciendo solamente lo que ya conocemos.

Para Coyle el aprendizaje ha de buscar el “punto dulce” (sweet spot) el lugar en el que nuestras habilidades no son bastantes y tenemos que ir despacio y cometer  errores, pero somos capaces de aprender de esos errores. Es como acostumbrarse a subir por una capa de hielo resbaladiza, con plena atención y fijándonos en cada paso que damos.

El profesor Borjk , jefe de psicología en la universidad de UCLA, dice que "las cosas que parecen obstáculos se convierten en deseables a largo plazo”. “ Es más importante un encuentro real que cientos de observaciones”.

Y como ejemplo el profesor Borjk cita la investigación de Henry Roediger en la Universidad Washington de St. Louis. En esa investigación se dividió a los estudiantes de historia natural en dos grupos. Uno de los grupos estudió la materia 4 veces, mientras que el otro grupo la estudió solamente una vez pero fue examinado 3 veces. sorprendentemente los resultados de aprendizaje fueron mucho mejores en el grupo que había sido examinado 3 veces.

Por ello es tan importante establecer un entorno en el que se puedan producir situaciones complicadas y nos podamos acostumbrar a resolverlas. Es lo que pasa con los simuladores de vuelo, como el inventado por Edwin Link en 1934 y que sirvió para evitar las masivas muertes de pilotos de aviación que se producían antes. Y es lo que pasa con el fútbol sala en Brasil, que al producir situaciones con poco tiempo y espacio para pensar, supone un entrenamiento extremadamente útil para que los jugadores de fútbol aprendan.

B)      La mielina.

Para Coyle la mielina, que es el revestimiento que se produce entre las conexiones neuronales cuando aprendemos, es esencial . Y así es como funciona

(1)   Todo movimiento humano, pensamiento o sentimiento es una señal eléctrica que viaja de manera exacta a través de una cadena de neuronas.

(2)   La mielina es el aislante que envuelve esas fibras nerviosas y que aumenta la fuerza, la velocidad, y la exactitud de la señal. Una señal si las fibras están rodeadas por mielina puede viajar hasta 100 veces más rápido que si no están rodeadas.  Además el tiempo entre una señal y otra se puede disminuir en más de 30 veces. Por ello el efecto de la mielina puede aumentar la circulación de señales neuronales en más de 3000 veces. Además la mielina permite la sincronización exacta de dos señales cerebrales para producir una tercera.

(3)   Cuanto más usamos un determinado circuito más mielina optimiza ese circuito y más fuertes, rápidos y fluidos son nuestros movimientos y pensamientos.  Además menos conscientes somos de que estamos usando ese circuito. Es la automatización que nos permite estar pendientes de otras cosas.

Por eso hemos de conocer los secretos de la mielina:

-          Responde no a pensamientos sino a la acción, y especialmente a la acción en estado de profunda concentración.

-          La mielina es universal. Sirve para cualquier clase de habilidad, para cualquier clase de aprendizaje.

-          La mielina aísla, no desaisla. Cuando tienes una conexión aislada no se deja de aislar. Por eso es tan difícil abandonar los hábitos anteriores, y por eso posiblemente la mejor forma de hacerlo es crear un hábito nuevo.

-          La mielina funciona de manera diferente a lo largo de la vida de una persona. Viene en grandes cantidades en la infancia y en la juventud, y empieza a disminuir a partir de los 50 años, aunque siempre hay una cantidad que permanece preparada para su uso.

¿Por qué existe la mielina? Para nuestros genes establecer directamente todos nuestros procesos mentales sería demasiado complicado y además lo que es válido en una época no es válido en otra. Así que la mejor manera de prepararnos para cualquier entorno sería crear un elemento -la mielina- que permita reforzar cualquier aprendizaje necesario en el momento.

En el próximo post sobre cómo tener talento, veremos cómo se ha de realizar la práctica profunda, y los otros elementos del talento.